No volveré a ser joven
Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
-envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.
Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.
Jaime Gil de Biedma.
"Poemas póstumos" 1968
martes, 15 de febrero de 2011
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grandes palabras y muy sabias, como la savia de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me hace pensar si es tiempo de darle un giro a mi obra, no va como yo pensaba.
ResponderEliminarMuy interesante.
Saludos.
gracias por tu visita nacho, y por tu comentario totalmente acertado, aqui te la devuelvo, jeje, interesante entrada, un beso desde tenerife.
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