En la época victoriana, en el siglo XVIII, se tenían muy presentes los fenómenos paranormales, y había un temor generalizado a los vampiros y zombies. Por esta razón los familiares de los fallecidos cubrían las tumbas con jaulas de hierro para hacerlas inquebrantables.
jueves, 4 de abril de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Deja tu comentario, si te apetece.